Sede de Acción Popular-CEDA

En este céntrico lugar (c/ Recogidas, 8) se encontraba la sede del principal partido de la derecha en la República. Fueron defensores de la propiedad, el catolicismo, la familia y la unidad nacional, propugnando un tibio reformismo social

En la calle Recogidas 8 se encontraba la sede de Acción Popular (AP), el principal partido de la derecha en Granada. Tras la desorganización de las derechas con la llegada de la República, y con el germen de la "Unión de Derechas", AP se constituye en Granada. En el mitin del 28 de febrero de 1932, al que acude Gil Robles, exponen su programa: defensa de la religión católica, la unidad de España, la familia, el orden, el trabajo y la propiedad. En aquellos tiempos de desigualdad social, abrazarse al mero estado de las cosas era oponerse a cualquier reforma social. El partido optaba por un posibilismo frente a la República, optando por participar políticamente.

En enero de 1933 AP se integra en la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA), el gran partido de masas de la derecha de la República. La hoja de ruta trazada por Gil Robles y sus hombres, consistía en participar en el poder, ocuparlo y, entonces, construir un nuevo tipo de República o sencillamente acabar con ella. Defendieron a los intereses de las clases medias y altas tradicionales, tanto en el campo como en la ciudad. Sus hombres más destacados en Granada fueron: Julio Moreno Dávila (periodista), Carlos Morenilla Blanes (abogado), Ramón Ruiz Alonso (linotipista de Ideal), Indalecio Moreno de la Cruz (industrial), Francisco Rodríguez (presidente provincial de AP), José María Vázquez y Vázquez (secretario provincial) o Guardiola (presidente de las Juventudes de Acción Popular).

AP-CEDA participará en el poder local, provincial y, a partir de 1934, nacional. En todas esas esferas su estrategia será minar la alianza republicano-socialista y, una vez que éstos dejasen el poder, participar en él para frenar las reformas sociales del bienio progresista. A partir de 1933, y especialmente a raíz del levantamiento de Asturias de 1934, AP-CEDA radicaliza sus discursos, optando por soluciones cada vez más autoritarias. Como consecuencia de esta deriva, algunos miembros moderados del partido lo abandonarán, triunfando los sectores más reaccionarios, cada vez más proclives a la retórica, propaganda y acciones del fascismo. En la huelga general de marzo de 1936 en Granada la sede de AP es incendiada, siendo trasladada a la calle Gracia, número 7. En ese contexto de confrontación, y tras anularse la victoria de las derechas por irregularidades electorales en las elecciones de febrero de 1936, AP formará una candidatura con cuatro hombres de Falange. Finalmente, no concurren a la repetición de dichas elecciones, involucrándose en la trama golpista y, algunos de ellos, en la brutal represión del verano de 1936.

 

Fuentes y bibliografía

 

El Defensor de Granada

Ideal

La Publicidad

José Antonio ALARCÓN CABALLERO: El movimiento obrero en Granada en la II República (1931-1936), Granada, Diputación, 1990.

Miguel CABALLERO PÉREZ y Pilar GÓNGORA AYALA: Historia de una familia: la verdad sobre el asesinato de García Lorca, Madrid, Ibersaf, 2007.

Mario LÓPEZ MARTÍNEZ y Rafael GIL BRACERO: Caciques contra socialistas. Poder y conflictos en los ayuntamientos de la República. Granada, 1931-1936, Granada, Diputación, 1997.

Manuel TITOS MARTÍNEZ (Coord.): Historia de Granada, Ideal, Granada, 2002-2003.

Ángel VIÑAS: Las armas y el oro. Palancas de la guerra, mitos del franquismo, Barcelona, Pasado y Presente, 2013.

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